Hyundai y Kia retiran del mercado 92.000 vehículos tras un posible incendio

Hyundai y Kia están retirando del mercado 92.000 vehículos estadounidenses y dijeron a los propietarios en un mensaje fechado el miércoles que estacionen sus autos afuera y lejos de las estructuras en caso de que los componentes eléctricos dañados se sobrecalienten y provoquen un incendio.

Los dos fabricantes de automóviles coreanos, que comparten un fabricante, dijeron que el problema radica en los controladores eléctricos de las bombas de aceite de ciertos vehículos.

Los modelos Hyundai que pueden verse afectados son los vehículos Palisade, Tucson, Sonata, Elantra y Kona 2023 y 2024. Kia está retirando del mercado algunos vehículos Soul, Sportage y Selto modelos 2023 y 2024, según documentos publicados por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras.

El problema se produce cuando “el controlador electrónico del conjunto de la bomba de aceite Idle Stop & Go contiene componentes eléctricos dañados que pueden hacer que el controlador de la bomba se sobrecaliente” generando riesgo de incendio, dijeron los fabricantes de automóviles en declaraciones a la agencia federal de seguridad vial.

Hasta ahora, los modelos Hyundai bajo revisión han tenido cuatro "incidentes térmicos", pero no se han reportado heridos, dijo Hyundai en un comunicado. Kia ha tenido seis “incidentes de derretimiento localizado”, pero no ha habido informes de incendios o heridos, según un comunicado enviado a The Washington Post.

"Los distribuidores inspeccionarán y reemplazarán el controlador de la bomba de aceite eléctrica, según sea necesario, de forma gratuita", dijeron las empresas en los comunicados.

Los propietarios de Hyundai serán notificados por correo antes del 25 de septiembre si son elegibles para el reemplazo, mientras que los propietarios de Kia serán notificados antes del 28 de septiembre, según las declaraciones.

No es la primera vez que Hyundai y Kia les dicen a los propietarios que estacionen sus autos afuera en caso de que se incendien. El año pasado, las empresas retiraron a revisión más de 245.000 vehículos por un problema eléctrico con el enganche de remolque.